PREPARADA, LISTA, YA. (o no)

He leído unas cuantas entradas antiguas y ... en serio lo adoro. Hoy escribo destrozada, por dentro, nerviosa, intranquila por fuera. 66,200 ... cerca de 65, por supuesto, pero no son 65 ni 64 y mucho menos de los 60. Me agobio y mi carácter lo refleja.
La hora de comer es una simple tortura y me desespera. Y encima parece que solo hago planes de cenas.... y comidas fuera de casa.

No me siento bien. Eso es real. No me siento bien, tampoco lloro, solo no estoy bien.

Pienso demasiado en echar por la boca lo que antes ha entrado en ella y eso tampoco esta bien. Lo sé. Nada de lo que hago o he hecho últimamente está bien y no sé como dar un nuevo giro a todo esto. Quizás me estoy precipitando con todo, quizás todo vaya demasiado despacio. Quizás no se.... pero no estoy bien.

Bicho me ha hablado y parece que todo se ha calmado, como que todo ha ido bien por unos instantes, pero eso tampoco esta bien que digamos. Ahora si. Ahora no. Ahora ni ahora, ni ahora, ni nunca. Nunca. Me agobio porque esto me estresa y el estrés (según creo yo) me engorda, y el tomate y el aire incluso, me siento completamente full...llena. Todo engorda.

Me iría a correr, a sacar todo esto, pero ¿a donde? ¿con quién? Me siento rara en mi casa, en mi cuarto en mi cama. Me siento cómoda aquí y aquí escribo ahora que tengo tiempo.

pd: no se si teñirme con mechitas rubias ¿lo haré?

60.65 Y 66 GRAMOS.

Hoy estoy demasiado motivada, EN SERIO. 

Hoy estoy dispuesta a escribir todo lo que estos meses me he resistido, eso que llevaba dentro. En el post anterior, doy una vuelta a la nueva etapa que se avecina. A mi viaje a Irlanda durante 10 meses... (en los cuales espero escribir...) No obstante, también he dado un repaso a eso del cariño, a mi historia de vacío y amor.

Ahora, el tema que más me preocupa: el que me da vueltas, el que no consigo entender, explicar o salir.... 

La comida. 

Comer, comida, comer, alegria, familia, felicidad, disfrutar, envidia, tristeza, melancolia, respeto, miedo, vomitar.

Estas son las palabras que me han salido en un flash mental, en unos 30 segundos de planteamiento... y realmente me faltan unas cuantas. Unas cuantas y recurrentes palabras que verifican  mi relación con la comida, como: Obsesión, Asco, rabia, irealidad, ideal, idealización. 
Vivo en un continuo: no comas, no engordes, no te peses. Y yo sin embargo, estoy en el incesante me peso, no como, engordo. 

No mentiré si digo que no aprecio el cambio. Que hace año y medio (y ojala escribiese algo de entonces, luego lo comprobaré) estaba en unos horribles 84 kilos. Ahora, rozando los 64, los 65 los 66 y gramos. Aún me peso obsesivamente cada mañana, intentando alegrarme o deprimiendome al oír 200 gramos más o menos.. un número redondo, otro torcido... mi vida.

Mi familia lo nota, mis amigos, mis rollos, la gente en general esta ... SATISFECHA: me hacen cumplidos y me regalan más miedos, porque no hay cosa peor que cuando sienten la tripa hinchada, llena, completa, cuando te acechan las ideas de vaciarla. 

Acabo de hacerlo. Vaciarla, vomitar y me siento bien. Años y años vomitando (no siempre) me han ayudado a no sentirme tan mal en el proceso, a no forzarme tanto al inicio y a sentirme plena al final. Así me siento ahora, avergonzada, nerviosa, plena.

Sé que la semana que viene empezaré a currar y trabajar con niños no te deja tiempo para nada (ni para comer) asique rezo todo lo que sé, para llegar a los 64 y listo. A lo liso de un estómago que se resiste a desaparecer. 

En agosto el festival y beberé y no podré hacer otra cosa porque es una experiencia única. Ya habrá váteres, ya habrá llantos y todo un año en el extranjero para perderlo y que se note, que se me vea.

Hoy por hoy yo veo el cambio, veo que mis pechos, mis tetas han disminuido sustancialmente y no me importa, la 100D en una niña de 16 años no quedaba bien. No me importaba realmente, suficiente preocupada me tenia tener una 42 de pantalón que luego fue una 44. Hoy soy feliz de meterme normalmente un 38 y en ocasiones una xs. 
Lo noto en la cara, antes redondeada ahora básicamente ovalada. Lo noto en mis piernas, lo noto en los brazos que si los odiaba (aun los odio), pero sobre todo lo noto en las estrías.

Miles, cientos, docenas, odio estos adornos del camino triunfal, las aborrezco. Es simplemente odioso que el castigo de no comer traiga aún más sufrimiento en forma de linea: de carretera, de EX-obesidad. Y estamos en Julio. Y el verano. Y la poca ropa y el ocultar y ocultar, me cansa. Me agota. 

Con según qué gente, he pasado a una nueva etapa llamada, "me la suda" y es fácil ir sin sujetador con mis amigas más cercanas o ponerme cualquier bañador y bronceador para teñir estas odiosas marcas.... pero el festival, pero los chicos... pero bicho (y su absurda perfección). 

Siento amor odio cuando me toca. 

Es amor porque me roza suavemente porque no deja de repetir lo suave que estoy, lo adorable que es mi piel, y yo inconscientemente sonrío. Eso hace mi cara pero mis neuronas trabajan alteradas: no le dejes tocar, no le dejes rozarte según en que partes, ¿se notará el tacto de una estría?, Carmen concéntrate en otra cosa, que no te coja, así no, así sí, finge un ataque de cosquillas, cambia de postura, PARA, vuelve.

Acostarme con Bicho es caótico, es pasional, es increíblemente complicado con todo esto en la mente y aun así, es por definición glorioso.

Mis estrías también me odian (eso creo). Me recuerdan el cambio y que por mas xs que me meta y por mas sentadillas, abdominales o ensaladillas coma, "fuiste gorda, obesa, enorme, Carmen" No lo olvides. Y no lo olvido. Me atormenta perder peso, pero aún más ganarlo asique tengo un plan que dejaré aquí mismo. 

Pienso llegar a los 60... a los 57 (nadie lo sabe) si es preciso, a eliminar esta tripa que me amarga la existencia y después, enfocaré mis retos, mis esfuerzos y mi vida a mantenerme y a arreglar el destrozo de cuerpo que tendré después. Ese es el plan y cada vez sacan más cosas. Que si para desprenderte de la piel sobrante en el pecho, que si camuflaje de estrias. Todo.

Pero paso a paso, comida a comida y estria a estria. Lo conseguiré.

pd: Lo inhumano que será ser madre. 

NEW LIFE. SAME LIFE

Me aventuro a escribir porque eso es algo que me encanta. (Quién lo diría cuando hace tanto que no me permito un momento para dejarlo aquí plasmado, para darme tiempo de sacar lo que llevo dentro).

Es julio y solo por eso es MAL. Es triste como siempre, un consuelo como nunca. Ha sido como debía ser e incluso menos de lo que esperaba.

Me aventuro a leer mi vieja yo, mi nueva yo y darme cuenta si algo, por ínfimo que sea ha cambiado lo más mínimos. Concluyó con un si no... con un no si que ni sé.

El cambio más extraordinario es el fracaso opositor. Día 13 de septiembre me senté esperanzada, soñando con que una de las mil plazas (ilusa solo fueron 300) llevase mi nombre. Imposible. 

Me habría encantado ser mas consciente, menos insconsciente y haber relatado cada semana, mi experiencia opositora. Imposible.

Pensé incluso en filmarlo, grabar y subir a youtube un canal a lo influencer. Absurdo. En parte siempre me quedará la duda del éxito, del reconocimiento. Porque esto, mal que bien, lo escribo para ti, para ti Carmen, para mi.

Saber que no pasaba de fase, me lleno el vacío. Días atrás había pensado que hacer si pasaba, si pasaba sola, si sonii me acompañaba. Si pasaba ella y yo no. Mis dudas se quedaron al 3,84. Con el supuesto suspenso y el tema gratamente aprobado.

Me voy a Irlanda a ser Aupair y ese es el sueño secreto, la verdad a voces que me lleva acompañando los 21 años de niña decente y sin problemas que he sido, que seré. 
Era algo fuera de lo corriente, siendo yo ... (pues trabajare, pues estudiare y demás), pero algo completamente ajeno a mi vida de metas, de retos y exigencias que yo misma me auto-impongo. Mi margen. Mi año. Lo haré el mes que viene de forma prematura y me asusta. 

Es ese tipo de miedo que mueve el mundo, que hace brillar las estrellas, que acojona lo más profundo que emulsiona dentro, que te hace levantarte feliz, asustada, mareada.... que te centra, que te aloca. Ese tipo de miedo. Temo por mis niñas que estarán 10 largos meses sin mí. Temo por sus estudios, temo por sus relaciones familiares, temo por que se olviden de mi. 

Temo por mi mejor amiga, amiguisima de siempre, que a veces me falta, me falla y a la que quiero como si el amor surgiera cada día. Temo porque es una cabeza loca, una enamorada empedernida que se aferra a la rutina y no vive. Me da pena. 
Quiero, ojala se vaya y vuele y viva y vuelva y volvamos y nos vayamos a thailandia porque de locuras así, debe ir la vida. Que se de tiempo y se enamore como las personas se enamoran y no en una semana de campamento. No de forma obsesiva y controladora. Porque ese tipo de amor es de adolescente, es de locos, no es amor. 

Desearía para ella una versión de mi, en chico (con el cual llevarme bien) desearía para ella la tranquilidad de no tener que mendigar por amor, por besos , por tiempo o por movimiento. Desearia para ella, menos exigencia al mundo y mas compromiso con quienes no le fallan. Pero ella es así. Y yo la quiero. Es sencillo y es llevadero y siempre estaré a su lado, pues aunque no es sencilla de querer, yo ya la quiero. Y yo cuando quiero, quiero.

En el tema del corazón este año hemos dado muchas vueltas también. Los de siempre, los de nunca y los nombres que se nos olvidarán con el paso de los tiempos: Ferran marchó y lo agradezco porque en el punto en el que estoy ahora estaría enamorada sin remedio (quizás exagero). PERO SI. Lo he logrado y lo logró cada día un poco más, el fantasma del amor con jose ya no me atormenta, se evade en recuerdos de una niña que ya es mujer ( o eso cree ella), es como que estoy mental fisica y corazonalmente preparada para dar el paso.

[ AÑADIDO MÁS TARDE]
Y me da pena porque el no deja de tropezarse. Una chica que no le gustaba, una señora mayor y ahora una niña, tropiezo tras tropiezo porque no deja sanar. Y aunque me sanación ha sido proporcionalmente inmóvil, comparativamente lenta. Ya no le quiero, ya no le necesito, ya no es. 

Un nuevo paso hacia ese vació que llaman amar. Estoy preparada para dar todo de mí y arriesgarme a perderlo todo, porque ya he estado allí y ya no da tanto miedo. (Acojona) 
Independientemente de que me costará, porque ya no solo era estar con el corazón sanado, si no que en mi naturaleza, en la esencia de mi vida esta la desconfianza y eso no hay Shakeaspeare que lo cure. No hay crepusculo que lo muerda, o quizas si. Pero encontraré a mi Edward a mi Otelo y cegada por este miedo, intentaré (si es que él me demuestra) confiar.

Bicho voló y volvió y picó y pica, pero eso es otra historia. Sé que él no es.. no es esa persona, por esto mismo de la confianza pero además, me encantaría saber por qué. Pero a los hechos me remito, y a la ausencia de sentimientos amorosos me aferro, para dar por hecho que por muy perfecto que sea todo cuando estamos juntos, cuando me roza, me eleva, me tiene... es absolutamente imperfecto cuando pasa, cuando no contesta cuando se pica, cuando se enfada.

Su personalidad me fascina. Lo bueno me envuelve y lo malo me atrapa porque me encantaría entenderlo, analizarlo, apoyarlo y ayudarle a ser mejor, no conmigo , tampoco por mi. Si no porque cuando me mira, cuando me toca, estoy segura de que esta lleno de cariño, de pasión, de anhelo. El otro día, (cada día) se las suelto. Porque no concibo que él crea de veras que yo siendo como soy, me enamoraria de alguien como él. 

Él dijo algo que me marcó y que es cierto, porque hace un año de toda la tontería pero en efecto y tal cual el dijo "no me conoces" "solo la superficie". Yo lo completaría con un "no nos conocemos". 

Sé algo de sus sueños pero no me sé sus pesadillas. ¿Sabría definirle en 5 palabras? Lo más seguro es que no. Es una superficie divina, pero yo soy de profundidades de oscuridades, de secretos. 

Físicamente y cuando estamos juntos, a veces siento que quiero que no acabe nunca. (cierto) pero no soy yo con él. Y él tampoco conmigo. Somos un pasatiempo bidireccional, una distracción inoportuna. Una rayuela hacia una barranco, pues contamos meses, contamos quedadas y ...y...y ya. 
Somos niños jugando, él es un niño de casi 26 años. Un pájaro que al que le gusta volar. Saltar en paracaídas, arriesgar... ¿cuándo madurara? ¿con quién? No somos amigos asique nunca lo sabré, eso me inquieta. No me produce más que una insana curiosidad y dudas. Él es duda. incertidumbre. Locura.

MMM no estoy yendo en orden porque si fuera así debía haber hablado antes de Grey. Fascinante de todo punto emprendedor, increible y en Mallorca. Espero que le vaya bien. 

Me acaba de venir a la mente que este año, si juntase el todo de todos (no han sido tantos,  SIGO CON EL PÁNICO AL NUMERO 10) saldría la perfección. Un bicho de personalidad sorprendente, (vale también ese físico, aunque me oprima, me haga sentir inferior...), Un grey en responsabilidad, actitud y proyección de trabajo. Un William en amor hacia la otra persona, en confianza. Un pj en el día a día, en juegos absurdos, en confidencias y motes cariñosos y bueno mi marido Daniel en risas y momentos únicos en afecto, en cariño, en pasión, en deseo..y no solo eso si no en perspectiva, en sacrificio y en forma de concebir la vida. Añado por añadir a Ferrán en misterio, en rareza, en físico también, más normal pero increíblemente atractivo, en esa labia embaucadora, en sus ojos, sus besos. Quizás pido demasiado. Quizás me conformo con poco. Quizás esté en Dublin y sea pelirrojo. Me fascina.

No imaginé ser tan niña de 22 años. Pero así me ha pasado con Pj... primero por no sentir una chispa que ardía en cada conversación, sin motivo aparente y después...por ser capaz de dar al stop en algo que seria un gran repeat. Mi objetivo hasta el 20 de agosto es pasarlo bien, es salir entrar, vivir.... y atreverme y me gustaría que fuera con una persona especial. En el menú hay mucho plato, alguno que otro prohibido... pero sin motivo, un sinsentido es mi intención de que bicho sea ese aquel.