Hace tiempo alguien escribió "naces y vives solo" yo añadiría... y decides y respiras y eliges y luchas y te enamoras y te derrotan y vences, solo.
Hace tiempo leí por ahí que llega un momento en la vida en el que te das cuenta que hayas tejido la red de apoyo que hayas tejido, al final estas solo. que esa red no te apoyará cuando más lo necesitas y entonces entiendes la tontería que has cometido toda tu vida, esa de apostar por las relaciones de amistad y de mirar por otros en vez de por ti. Después, te agobia pensar que tus padres tampoco te apoyan pero que eso no tiene el mismo efecto en ti, ya no ejercen ningún poder sobre ti en ese sentido. Estás solo con todo el poder. "Poder" divina palabra que te hace sentir libre por un instante, pero todo poder acarrea soledad, estás solo. Así, mirando tus cartas solo quedan dos opciones: hundirte o nadar.
Y siendo francos yo no sé aguantar a flote.
Me cuesta hacerme el muerto o la muerta. Me ahogo.
Yo no elijo la opción de nadar. Que me lleve la corriente.
Hoy entiendo exactamente por qué esa persona cantaba aquello y por que la otra escribió eso otro, hoy entiendo que todo eso es real. Voy a hacer 24 años y ya no debería depender del juicio externo de la gente, del beneplácito de mis padres o de ninguna otra fuente de gratificación que no fuera sentirme bien con lo que estoy haciendo. No obstante, este poder me pilla de nuevas y me ha dolido como nunca. Me hace sentir tan sola. Como siempre. Asique como de costumbre he perdido la mañana tumbada en el sillón meditando, llorando a ratos, con la cabeza del revés.
No seré la primera ni la última a la que sus padres no apoyan en sus proyectos, pero para mi eso ha sido algo descorazonador. Creen que merezco más y que debería esperar para encontrarlo. Aunque en mi interior creo que ellos quieren algo más para sí, es decir, no sería la primera vez que comparan hijos con mis tíos, en el sentido de ver quien ha engendrado a los más inteligentes, los más guapos y delgados, los más estudiosos, los más aptos. Por eso creo que no les vale con el plan que me había diseñado en el que al mes sacaria unos 900$
Es gracioso como todo el mundo dice que encontraré algo mejor ¿Y donde lo busco? No hay Tinder para el trabajo ideal e Infojobs lo tengo saturado de ofertas absurdas. Es el momento, mi momento de romper el cascarón y volar, con estas alas intactas que me ha proporcionado mi desdichada y protegida vida. Como céntimos en el banco y 15 euros en la cartera, ha llegado la hora de espabilar. ¿no crees?
Si.
..Llena ese vacío
Sigo recordando el dia que murio mi corazón
FELIZMENTE VACÍA.
viernes, 31 de agosto de 2018
viernes, 24 de agosto de 2018
Escritora.
Hoy estoy que ni yo misma me lo creo, dos entradas en una. Mi mente grita bieeeeeen!!!!. Pero reflexivamente, si tanto tengo que escribir es que poco anda bien. Todo camina mal. Quería explayarme algo más en como va mi vida. Sobre todo por lo mismo de siempre. Adoro que pase el tiempo que me entre otro de mis capítulos de bajón y recurra a este espacio para desahogarme... y en ese proceso de perdida de soledad, me auto-lea y respire aliviada sabiendo que he estado peor y mejor y que de todo al final, se sale. El cuchillo no es tan afilado, ni la piscina tan profunda.
Por eso a mi "yo" del futuro decirle que oficialmente eres un C1, y una Z de persona. Casi lloro y hace mucho que no lloraba por algo que no empezase por J. 181 un logro al fin y es mas, seguramente también trabajes. Me asombra la manera en la que la vida se va organizando. Sola.
Si todo sale, habrá algo más en lo que pensar a parte de, por supuesto, el peso. Eres una cabezota, una testaruda despiadada y por eso antes o después te van saliendo las cosas. Es curioso ver que cuando fracasas todos dicen lo mismo "a la siguiente", "no pasa nada" y cuando lo consigues "yo sabia que lo ibas a conseguir", "eres una maquina", "estaba claro". En ambos casos, tu esfuerzo es lo de menos y eso jode. Joder y raya. Como los cuchillos.
También me raya la vida y por supuesto la muerte. Mi tío Paco y la idea de que falte pronto. Creo que no puedo ser más inconsciente y más consciente a la vez del miedo que me da mirarle a los ojos y ver como se va deteriorando. En este sentido me aliviada saber que se encontrará con mi hermano y esa es la meta que tenemos todos. Volvernos a encontrar. Pero ¿Qué será de mi proyecto sin mi tío? ¿Que sera de él y de todos?
Qué fácil es animarme a mi misma. Escribir, pesarme y verme con 200gr menos, es todo lo que necesito para no acabar con todo esto. No es nada pero es suficiente. Ahora volveremos a fingir la normalidad, la locura de los 23 que se acaban, la comprensión de los míos y el amor efímero que siento por los que meto en mi cama.
Por eso a mi "yo" del futuro decirle que oficialmente eres un C1, y una Z de persona. Casi lloro y hace mucho que no lloraba por algo que no empezase por J. 181 un logro al fin y es mas, seguramente también trabajes. Me asombra la manera en la que la vida se va organizando. Sola.
Si todo sale, habrá algo más en lo que pensar a parte de, por supuesto, el peso. Eres una cabezota, una testaruda despiadada y por eso antes o después te van saliendo las cosas. Es curioso ver que cuando fracasas todos dicen lo mismo "a la siguiente", "no pasa nada" y cuando lo consigues "yo sabia que lo ibas a conseguir", "eres una maquina", "estaba claro". En ambos casos, tu esfuerzo es lo de menos y eso jode. Joder y raya. Como los cuchillos.
También me raya la vida y por supuesto la muerte. Mi tío Paco y la idea de que falte pronto. Creo que no puedo ser más inconsciente y más consciente a la vez del miedo que me da mirarle a los ojos y ver como se va deteriorando. En este sentido me aliviada saber que se encontrará con mi hermano y esa es la meta que tenemos todos. Volvernos a encontrar. Pero ¿Qué será de mi proyecto sin mi tío? ¿Que sera de él y de todos?
Qué fácil es animarme a mi misma. Escribir, pesarme y verme con 200gr menos, es todo lo que necesito para no acabar con todo esto. No es nada pero es suficiente. Ahora volveremos a fingir la normalidad, la locura de los 23 que se acaban, la comprensión de los míos y el amor efímero que siento por los que meto en mi cama.
Que poco queda.
Hoy también es un dia de esos. De esos en los que no me levantaria de la cama, o del sillon, o simplemente del suelo. Hoy es un dia de esos que necesito algo que me impulse, y como eso no existe, como esa persona no existe necesito venir aqui, vomitarlo todo y seguir. Es tan negro y triste el momento en el que estoy pasando que necesito hacer una lista de cosas que deberia hacer porque realmente mi mente esta a punto del colapso.
- Pesarme
- Llamar a colegios
- Cocinar
-Limpiar
- Ir al gimnasio.
Pesada y deprimida me hallo en el último rincón de mi casa, escribiendo. Con la esperanza de sentirme mejor cuando acabe. He vuelto a ese punto en que todo me da miedo, me da miedo comer y engordar, no comer y engordar, ir al gimnasio y engordar, no ir y engordar, desayunar y engordar, no desayunar y engordar. La cinta de lomo, el agua, el pan, el aire..... todo me da miedo (y asco) por si se queda dentro de mí y de mi barriga. Suspiro.
¿Cuando acabará? voy a hacer 24 y sigo como con los 15 y los 17 y los 21 y ayer mismo, con ese sentimiento de que nada merece la pena si no estoy delgada, con ese ansia por desaparecer.
Doy gracias a mi perfil de twitter. Bendito el día en que decidí abrirlo y gracias al cielo que me gusta leer. Leer la vida desastrosa de muchas otras, la lucha incesante de todas. Parece paradójico pero tanta desesperación me calma.
Bicho ha vuelto como cada verano. Lo típico y con él todas mis inseguridades. Seamos sinceros, siendo sincera, Luis ya había abierto ese cajón de mierda y lo peor es que pasa el tiempo y en vez de cerrarlo mete más y más mierda. "mira esta chica que buena esta" "me gustaría que hicieses sentadillas" "¿por que no fortaleces el vientre?"
Sutil pero incisivo, como los colmillos de una serpiente. Debería cortar con eso, cortar con eso y mi piel, porque me siento tan culpable de no ser quien el desearía. Lo odio.
El plan b es suplicar a Antonio descubrir en su frialdad, la parte de persona que tiene, de grandisima persona que oculta. Me fascina cuando me deja entrar en su mente, en sus pensamientos aunque sean 15 minutos. Me encanta seguir descubriendo que no se nada de él aunque ya han pasado dos años. Dos largos años desde que apareció para picarme. Su veneno aun me duele, me cautiva. Me gusta, siempre me ha gustado y siempre me gustará, es así. Y ya no solo por ese halo de incertidumbre si no porque estoy convencida de que podría ser la persona que estoy esperando. Podría, pero no es.
Es interesante lo corto que puede ser un beso y todo lo que significa o te aporta. Cuando él me besa siempre me muerde, me lastima, me encanta y me eleva, pero me muerde. Nunca me besa con pasión, con los labios, con amor, siempre con esa necesidad primitiva de poseerme.
Nunca me besa cuando se despide, simplemente se va. Es increíble cómo dolía antes y lo asimilado que lo tengo ahora. No volverá hasta dentro de meses, seguro. Lo que me provoca inseguridad son las ganas que tengo de que me hable. Son las ganas que tengo de que él fuera diferente, solo un poco. Pero la gente no cambia, que me lo digan a mí que aquí sigo.
Un lunático aventurero pero cariñoso, amoroso. MIO. Pero él no es de nadie y lo respeto. Le respeto y le conozco tanto como para saber que estar con él son horas alegres, momentos inolvidables, sexo y despedidas. Lo llevo bien. Que bien se vive cuando no esperas nada.
Guille es otra cosa, es lo opuesto y lo igual es la historia que nunca será y el pensamiento de que podría ser maravilloso. Somos tan iguales por dentro.... pero no soy su tipo ni lo seré nunca, a él le va lo complicado, su rama sanitaria y poco más sé de sus gustos la verdad. Podría imaginarme con él el resto de mi vida y no es algo que venga de ahora. Él nunca lo sabrá pero ya me encantaba cuando pesaba más, cuando pensaba menos, cuando de algún modo me las lanzaba. Cuando se preocupaba menos por un cuerpo que siempre fue perfecto. Siempre lo fue porque él era él y sigue siendo el mismo. Con un envoltorio u otro pero esas ideas, esos compromisos, esa seguridad a la hora de hablar de amar, de amor y de pareja.... Deseos.
Me encanta y sigue sorprendiéndome lo bien que me voy sintiendo a medida que tecleo en este viejo ordenador. Todo parece más claro, dejo de ser la sonámbula de sentimientos y me convierto en mi otro yo. Con ciertas ganas de empezar de nuevo, de no abandonarme del todo.
- Pesarme
- Llamar a colegios
- Cocinar
-Limpiar
- Ir al gimnasio.
Pesada y deprimida me hallo en el último rincón de mi casa, escribiendo. Con la esperanza de sentirme mejor cuando acabe. He vuelto a ese punto en que todo me da miedo, me da miedo comer y engordar, no comer y engordar, ir al gimnasio y engordar, no ir y engordar, desayunar y engordar, no desayunar y engordar. La cinta de lomo, el agua, el pan, el aire..... todo me da miedo (y asco) por si se queda dentro de mí y de mi barriga. Suspiro.
¿Cuando acabará? voy a hacer 24 y sigo como con los 15 y los 17 y los 21 y ayer mismo, con ese sentimiento de que nada merece la pena si no estoy delgada, con ese ansia por desaparecer.
Doy gracias a mi perfil de twitter. Bendito el día en que decidí abrirlo y gracias al cielo que me gusta leer. Leer la vida desastrosa de muchas otras, la lucha incesante de todas. Parece paradójico pero tanta desesperación me calma.
Bicho ha vuelto como cada verano. Lo típico y con él todas mis inseguridades. Seamos sinceros, siendo sincera, Luis ya había abierto ese cajón de mierda y lo peor es que pasa el tiempo y en vez de cerrarlo mete más y más mierda. "mira esta chica que buena esta" "me gustaría que hicieses sentadillas" "¿por que no fortaleces el vientre?"
Sutil pero incisivo, como los colmillos de una serpiente. Debería cortar con eso, cortar con eso y mi piel, porque me siento tan culpable de no ser quien el desearía. Lo odio.
El plan b es suplicar a Antonio descubrir en su frialdad, la parte de persona que tiene, de grandisima persona que oculta. Me fascina cuando me deja entrar en su mente, en sus pensamientos aunque sean 15 minutos. Me encanta seguir descubriendo que no se nada de él aunque ya han pasado dos años. Dos largos años desde que apareció para picarme. Su veneno aun me duele, me cautiva. Me gusta, siempre me ha gustado y siempre me gustará, es así. Y ya no solo por ese halo de incertidumbre si no porque estoy convencida de que podría ser la persona que estoy esperando. Podría, pero no es.
Es interesante lo corto que puede ser un beso y todo lo que significa o te aporta. Cuando él me besa siempre me muerde, me lastima, me encanta y me eleva, pero me muerde. Nunca me besa con pasión, con los labios, con amor, siempre con esa necesidad primitiva de poseerme.
Nunca me besa cuando se despide, simplemente se va. Es increíble cómo dolía antes y lo asimilado que lo tengo ahora. No volverá hasta dentro de meses, seguro. Lo que me provoca inseguridad son las ganas que tengo de que me hable. Son las ganas que tengo de que él fuera diferente, solo un poco. Pero la gente no cambia, que me lo digan a mí que aquí sigo.
Un lunático aventurero pero cariñoso, amoroso. MIO. Pero él no es de nadie y lo respeto. Le respeto y le conozco tanto como para saber que estar con él son horas alegres, momentos inolvidables, sexo y despedidas. Lo llevo bien. Que bien se vive cuando no esperas nada.
Guille es otra cosa, es lo opuesto y lo igual es la historia que nunca será y el pensamiento de que podría ser maravilloso. Somos tan iguales por dentro.... pero no soy su tipo ni lo seré nunca, a él le va lo complicado, su rama sanitaria y poco más sé de sus gustos la verdad. Podría imaginarme con él el resto de mi vida y no es algo que venga de ahora. Él nunca lo sabrá pero ya me encantaba cuando pesaba más, cuando pensaba menos, cuando de algún modo me las lanzaba. Cuando se preocupaba menos por un cuerpo que siempre fue perfecto. Siempre lo fue porque él era él y sigue siendo el mismo. Con un envoltorio u otro pero esas ideas, esos compromisos, esa seguridad a la hora de hablar de amar, de amor y de pareja.... Deseos.
Me encanta y sigue sorprendiéndome lo bien que me voy sintiendo a medida que tecleo en este viejo ordenador. Todo parece más claro, dejo de ser la sonámbula de sentimientos y me convierto en mi otro yo. Con ciertas ganas de empezar de nuevo, de no abandonarme del todo.